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El lechazo castellano de Zamora, criado con leche materna, ofrece una carne tierna y de sabor suave, perfecta para reuniones familiares. Asado, a la plancha o rebozado, marida con un DO Tierra del Vino y patatas al romero. Disponible en medio o entero, se conserva refrigerado 2-3 días o congelado al vacío. (25,80 €/kg).
¿Y si ahora fuera una tarde de domingo?, con el aroma de la leña crepitando, risas que se mezclan con el tintineo de copas. Ese es el escenario que nuestro lechazo castellano promete. Criado en las granjas de Zamora, cada cordero se alimenta exclusivamente con leche materna, un proceso tradicional que asegura una carne tierna y de sabor suave. Su textura excepcional, casi sedosa, se deshace en la boca, mientras su aroma delicado evoca la pureza de los campos castellanos. ¿Por qué elegir este lechazo? Porque no es solo carne, es una conexión con la tierra, con el cuidado artesanal y con el placer de compartir momentos únicos con quienes más quieres. La venta directa desde nuestra finca garantiza frescura y autenticidad en cada bocado, un compromiso que sientes desde el primer corte.
Trata al lechazo con el respeto que merece. A la plancha, busca un dorado crujiente por fuera, dejando el interior jugoso. Si prefieres el horno, cocínalo lentamente a 180 ºC con un toque de romero y ajo para realzar su sabor natural. Para un rebozado, envuélvelo en una fina capa de huevo y pan rallado, y fríelo con precisión. En la brasa, déjalo que absorba el humo de la leña, girándolo con cuidado. Cada método es un ritual, una forma de honrar la calidad de esta carne. Sácalo de la nevera 1 hora antes para que alcance la temperatura ambiente y conserve su ternura.
Un lechazo castellano pide compañía que esté a su altura. Un vino tinto DO Tierra del Vino, con sus notas de frutos rojos y taninos suaves, abraza la suavidad de la carne. Si prefieres blanco, un Verdejo de Rueda fresco aporta un contrapunto vibrante. Acompáñalo con patatas asadas al romero o una ensalada de rúcula con granada para un toque moderno. Para los más tradicionales, unas alubias blancas estofadas crean un plato reconfortante que hará que todos pidan repetir. Descubre recetas completas en nuestro blog para inspirarte.
"Disfruta del auténtico sabor del cordero lechal: consérvalo empacado al vacío en tu nevera, y mantén intacta su textura y jugosidad hasta el momento de cocinarlo, retíralo del envase y déjalo 1 hora a temperatura ambiente para que sus jugos se asienten. Este cuidado asegura que cada bocado mantenga la autenticidad que solo un producto de Zamora puede ofrecer.
El lechazo castellano se adapta a tus necesidades. Disponible en medio lechazo de 2,5 kg aproximados o entero de 5 kg aproximadamente. El peso puede variar ligeramente por la crianza natural de cada cordero, lo que garantiza su carácter único. Para pedidos de hostelería, ofrecemos cortes personalizados, con descuentos especiales según el volumen. Consulta las opciones para llevar esta joya a tu mesa.
