Solomillo de vaca zamorana

Nuestro solomillo de vaca es mucho más que un simple corte: es el resultado de una crianza cuidada y respetuosa en los verdes pastos de Zamora. Las vacas que nos brindan esta carne excepcional son criadas en libertad, disfrutando de amplios espacios donde pastan de manera natural, alimentándose de hierbas y forrajes autóctonos que enriquecen su sabor y calidad.

Con esmero y dedicación, controlamos todo el proceso para garantizar que cada pieza de solomillo madure de forma óptima, desarrollando una textura tierna y un sabor profundo que solo la paciencia y el respeto por el animal pueden lograr. La maduración potencia los aromas y concentra los sabores, haciendo de este solomillo una experiencia gastronómica única.

Perfecto para los paladares más exigentes, este corte premium es ideal para preparar a la parrilla, a la plancha o al horno, logrando una jugosidad y suavidad excepcionales en cada bocado. Recomendamos cocinarlo a fuego medio-alto para sellar la carne y conservar sus jugos naturales, logrando un punto de cocción que realce su sabor sin perder ternura.

Para maridar, sugerimos un vino tinto robusto y equilibrado, como un Ribera del Duero o un Toro de Zamora, que complemente la intensidad y elegancia del solomillo, potenciando la experiencia completa.

En Los Zamoranos, combinamos tradición y calidad para llevar a tu mesa lo mejor de nuestra tierra, reflejando el compromiso con una carne auténtica, natural y llena de vida.

🍽️ Sugerencia de preparación y maridaje

Sella el solomillo de vaca madurado en una sartén caliente con un toque de aceite de oliva virgen extra. Cocina 2–3 minutos por cada lado a fuego medio-alto, hasta lograr un dorado perfecto por fuera y un interior jugoso al punto deseado. Añade sal gruesa y un poco de pimienta negra recién molida justo al final.

Acompáñalo con un puré de patatas cremoso o unas verduras salteadas al ajillo. Para realzar todo su sabor, sirve con una copa de vino tinto D.O. Toro, con cuerpo y notas a fruta madura y roble, que armoniza perfectamente con la intensidad del solomillo madurado.

Para asegurar una correcta conservación del solomillo y mantener su calidad, sigue estas indicaciones:

Conservación responsable

Guárdalo en la parte más fría del refrigerador (normalmente, la parte inferior o el fondo)

No abras el paquete hasta que vayas a cocinar la carne. Una vez abierto, consúmelo en un plazo máximo de 2–3 días.

Si no vas a consumir el solomillo dentro del tiempo recomendado, considera congelarlo directamente en su envase.

No guardes la carne cerca de la puerta del refrigerador, donde la temperatura varía más.